“Jehová, hasta los cielos llega tu misericordia, y tu fidelidad alcanza hasta las nubes. Tu justicia es como los montes de Dios, tus juicios, abismo grande.
Oh Jehová, al hombre y al animal conservas.
¡Cuán preciosa, oh Dios, es tu misericordia!
Por eso los hijos de los hombres se amparan bajo la sombra de tus alas” (Salmos 36:5-7)
Señor, hoy te adoro por tu fidelidad
Pasan los años, envejezco, mas tu sigues siendo el mismo
Si algo te puedo decir en este día con toda seguridad
Es que sano o enfermo, siendo prosperado o sin dinero en el bolsillo
Acompañado o en la total soledad
Aquí estoy Señor, no me he ido
Señor, grande es tu fidelidad
Pasan los años, he sido probado, mas tu poder no cambia
Si algo he podido ver en estos años de mi vida en verdad
Es que siendo pecador, tu me amaste por tu gracia
Siendo débil me fortaleciste por tu bondad
Aquí estoy Señor, no me he ido
Señor, me sostiene tu fidelidad
Pasan los años, veo el futuro y confío en tu amor
Todo el universo y la vida son sostenidos por tu gracia y bondad
Mas me sorprende que sostengas a este triste pecador
Mi corazón se goza en reposar no en mi, sino en tu eternidad
Aquí estoy Señor, por tu gracia, no me he ido
Señor, hoy doblo mis rodillas al adorarte por tu fidelidad
Mis lagrimas se derraman, mi corazón arde, mis manos se alzan
Amarme aun sabiendo quien soy en verdad
No puedo entender tu misericordia y amor
Que el Altísimo mire y guarde a un triste pero amado pecador
Aquí estoy Señor, y por TU fidelidad, a tu lado siempre estaré
“Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad” (Lamentaciones 3:22-23)
Amen!